Qué mejor para terminar el año y para comenzarlo, que la ternura y luminosa sencillez de Ángel González. El mismo que nos enseñó que gracias a una sonrisa amanece sin sombras la alegría del mundo. Así sea.
Yo sé que existo
porque tú me imaginas.
Soy alto porque tú me crees
alto, y limpio porque tú me miras
con buenos ojos, con mirada limpia.
Tu pensamiento me hace
inteligente, y en tu sencilla
ternura, yo soy también sencillo
y bondadoso.
Pero si tú me olvidas
quedaré muerto sin que nadie
lo sepa. Verán viva
mi carne, pero será otro hombre
-oscuro, torpe, malo- el que la habita...
Ángel González en Palabra sobre palabra
Que nunca falte alguien que nos piense, porque (lo escuché el otro día) existimos porque alguien nos piensa, y no al contrario. Y que siempre haya unos brazos dispuestos a acogernos.
Mucha luz y mucho cariño para este 2012.
Mi abrazo para todos.
Que nunca falte alguien que nos piense, porque (lo escuché el otro día) existimos porque alguien nos piensa, y no al contrario. Y que siempre haya unos brazos dispuestos a acogernos.
Mucha luz y mucho cariño para este 2012.
Mi abrazo para todos.